El 13 de Octubre del 2013 había comenzado la huelga de Panrico, ¿Cuáles son las principales lecciones y enseñanzas?

Molina: La principal enseñanza a mi modo de ver, y creo que es la opinión de muchos compañeros, ha sido comprobar que existe un camino que es la lucha obrera, camino que muchos consideraban obsoleto, pero que con organización, ganas de luchar y sobre todo buscando la unidad de los trabajadores, estudiantes, jóvenes en precariedad y todo tipo de colectivos dispuestos a luchar por los intereses de la clase trabajadora, podemos llevar adelante. Al margen de esto, comprobar que no podemos esperar nada de la burocracia sindical, (CCOO, UGT), porque desde el primer día de la huelga han intentado boicotearla, retrasando sentencias, chantajeando a los trabajadores y posicionándose al lado de la empresa. Tampoco de la Generalitat, porque ha mirado para otro lado en el conflicto, permitiendo que la empresa vulnerara el derecho de huelga, impunemente. Y por último, de la cantidad de políticos que han pasado por el campamento para hacerse la foto, y luego han desaparecido.

Luisi: Hoy se cumple un año de la huelga y vemos las fotos de cuando empezó, el 13 de Octubre del año pasado. Y pude ver cómo durante esos ocho meses habíamos cambiado mucho, hemos madurado mucho. Fueron ocho meses pero parece que hubiesen pasado años. No han sido fáciles, pero si hemos ido a la huelga es porque estábamos convencidos que ese era el camino, el de la lucha. La huelga era la única arma que teníamos como clase trabajadora. Y aunque no acabó como hubiésemos querido, pienso que no hemos perdido nada. Hay gente que dice que ha perdido ocho meses… Yo no lo siento igual. Hemos luchado por nuestra dignidad y yo seguiré luchando en todo lo que pueda y todo lo que esté en mis manos lo voy a hacer.

Sabemos que después de la huelga la lucha ha continuado. ¿Cuáles sus objetivos y perspectivas?

Molina: Los y las trabajadoras de Panrico después de casi una año de lucha,seguimos haciendo asambleas y luchando, puesto que aún no ha terminado. Todavía estamos luchando por conseguir que los despidos sean declarados nulos o en su defecto que sean declarados improcedentes, ya que obedecen a la vulneración de los derechos fundamentales, poniendo el punto de mira en todos aquellos que se han significado en la huelga, siendo parte activa de manifestaciones, entrevistas en radio, TV, en general en los medios de difusión. De toda esta batalla llevada a cabo durante estos meses, si algo hemos aprendido es que la clase trabajadora debe permanecer unida.

Luisi: Sí, por siempre hemos buscado la coordinación con otras luchas, como fue entre Panrico y Coca Cola. Y esta unidad no fue a través del comité de empresa, sino a través de nuestra propia voluntad que nos fuimos a Madrid y por ejemplo, el comité de empresa de Coca Cola, sí que estaba por enlazar las luchas y se enlazaron de esa manera. Así culminamos nuestra huelga, en una unidad que sigue hasta estos días. Hemos hecho un acto muy bueno en Barcelona que mostraba esta unidad. Pero el comité de empresa nunca hizo nada por unirse con la lucha de Coca Cola, ¡ni con Almstom que está muy cerca de Panrico! Y que también tuvieron despidos. También fue muy importante la coordinación con las mujeres de Cocacola fue una experiencia buenísima y con ella también tenemos lazos todo el tiempo. Nunca me voy a olvidar en el encuentro de mujeres para la coordinación de las luchas en Madrid, fue muy emocionante.

Molina: Hay que buscar la unidad de todas las luchas, la unidad obrero estudiantil, y el apoyo de todas aquellas organizaciones y sindicatos de base que al margen de la burocracia sindical, cada vez más enquistada y posicionada al lado de la patronal. Es impensable que los sindicatos mayoritarios de este país, reciban subvenciones millonarias del Estado, cobren comisiones por ERE (Ente de Regulación de Empresa) pactado y pretendamos que defiendan nuestros intereses, nadie muerde la mano del que te da de comer.

Luisi: Nos hemos sentido muy traicionados por los mismos representantes nuestros y hasta por la Generalitat; que desde el primer momento lo que han querido es vendernos. Pero lo peor y más triste es que los que se dicen “nuestros representantes”, en lugar de habernos apoyando, nos han echado a un lado. Para lo único que han actuado es para aislarnos. Y es es la gran traición de ellos. Si nos hubiesen apoyado desde un principio como han estado haciendo otras organizaciones que estuvistéis apoyándonos desde el primer momento, no hubiésemos acabado los ocho meses como hemos acabado.

¿Qué les transmitirías a los trabajadores y trabajadoras que hoy salen a luchar?

Molina: Primero, lo que he dicho en varias charlas a las que me han invitado junto a otros trabajadores. Que si la clase capitalista tiene sus propios portavoces, sus políticos que representan a los empresarios, los obreros también debemos tenerlos, porque somos quienes movemos el mundo, porque el sistema no podría funcionar sin nosotros. Los obreros también debemos tener nuestros portavoces. Somos la clase legitimada para poder luchar contra los patrones y empresarios de este sistema capitalista.

Segundo, que no podemos confiar en las izquierdas institucionales. Mira, hace unas semanas, Izquierda Unida fue capaz de organizar un premio como ejemplo de lucha, se lo concede por votación a las luchas de Panrico y Coca Cola y llaman a recogerlo a los dos integrantes del comité de empresa de Panrico, que son los que han llevado a cabo la traición a los trabajadores, algunos compañeros tuvimos que abuchearlos en público, porque era insoportable escucharlos en la tarima hablar de lucha obrera, unidad de los trabajadores y criticar al gobierno de la Generalitat, cuando desde el primer momento, han sido aliados de la patronal y del gobierno. Un gobierno que concede un crédito a la empresa de 8 millones de euros, y ésta emplea en pagar indemnizaciones de 60 despedidos más, permitiendo que con el dinero de nuestros impuestos se indemnice a los trabajadores.

Luisi: Si, nos sentimos indignados cuando nos enteramos de esto, fue una vergüenza que hayan entregado el premio al presidente y vicepresidente del comité de empresa, que como ya te decía, nos traicionaron desde el primer día. Por eso, yo también creo que como trabajadores y trabajadoras, hemos hecho política de clase obrera y tenemos que hacerla por fuera de estos partidos políticos. Aunque hace tiempo que nos quisieron hacer creer que la clase obrera ya no existe más. Yo con la huelga me he dado cuenta de que somos clase obrera y demostramos nuestra fuerza cuando hemos estado haciendo política social, política nuestra, de la clase obrera porque así nos reivindicamos cuando salimos a difundir nuestra lucha, nuestra caja de resistencia y con la huelga misma. Porque cuando llegas a la lucha te das cuenta de qué es la clase obrera y así es que hacemos política, reivindicándonos nosotros como clase obrera.

Molina: Después de esta lucha, yo siempre digo que ya no podemos volver a vivir como antes. Nos sentimos en la obligación de luchar junto a otros trabajadores y trabajadoras para derrocar todos los planes de recortes del Gobierno y contra los despidos masivos y los cierres patronales de las fábricas. Nosotros siempre buscamos apoyar otras luchas, contra los desahucios, a los estudiantes. Hemos luchado hasta contra la Ley del Aborto de Gallardón junto a nuestras compañeras trabajadoras. Creo también que si los trabajadores nos quitamos de encima a la burocracia o casta sindical, podemos iniciar un camino hacia un mundo laboral que recupere las conquistas obtenidas a lo largo de tantos años con la lucha.

Luisi: Si, nos sentimos orgullosos de haber hecho esta huelga. Además, como mujeres trabajadoras hemos luchado para derrotar la ley del aborto del PP, ¡y hemos ganado! ¡Dimitió Gallardón! No olvidaré nunca nuestra participación el 8 de marzo como trabajadoras y los encuentros con las mujeres de Coca Cola. Yo siempre seguiré luchando en todo lo que pueda. Y como cantamos y gritamos siempre: ¡Panrico es y será ejemplo de dignidad!

Publicado por Cynthia Lub

Cynthia Lub | @LubCynthia :: Barcelona

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