El Tribunal Supremo ratificó esta mañana la nulidad del ERE de Coca-Cola, como antes lo había hecho la Audiencia Nacional. Los trabajadores y trabajadoras de Coca-Cola festejaron esta cuarta sentencia judicial a su favor, y exigen el cumplimiento efectivo de la misma, con la reapertura de la fábrica en Fuenlabrada.

Esta mañana, entre una mezcla de confianza y nerviosismo, se esperaba la resolución del Tribunal Supremo sobre el ERE de Coca-Cola. “No pude dormir en toda la noche”, “estoy con los nervios de punta”, “esta la tenemos que ganar”, nos decían.

Los trabajadores y trabajadoras de Coca-Cola Fuenlabrada llevan 15 meses luchando por la reapertura de la planta. Ya obtuvieron tres sentencias judiciales favorables de la Audiencia Nacional, pero la empresa apeló al Tribunal Supremo.

Poco después de las 12 hs. llegó la esperada noticia: el Tribunal ratificó la nulidad del ERE y los despidos. Estallaron los gritos de alegría y los abrazos, la emoción contenida tanto tiempo.
Juan Carlos Asenjo, portavoz del Comité de empresa de Fuenlabrada, informó de la resolución sin dejar de advertir que es necesario leer detenidamente la resolución para evaluar sus detalles. También señaló que los próximos días la empresa tendría que hacer efectiva la resolución, y en caso de que no lo haga, se deberán evaluar los pasos a seguir para hacerle cumplir la ejecución de la sentencia.

La resolución del Tribunal Supremo sienta un precedente judicial muy favorable para todos los trabajadores que enfrentan EREs y despidos como en el caso de Coca-Cola.

El Tribunal Supremo difundió un comunicado de prensa donde explica su decisión:

“DESPIDO COLECTIVO COCA COLA. El Tribunal Supremo declara la nulidad del despido por vulneración del derecho de huelga. El Pleno de la Sala de lo Social del Tribunal Supremo en su reunión de hoy ha decidido confirmar la nulidad del despido colectivo del grupo Coca Cola por vulneración del derecho de huelga, lo que hace innecesario analizar el resto de las cuestiones planteadas.

La Sala entiende que durante la huelga convocada en contra del despido por el cierre del centro de Fuenlabrada, la empresa sustituyó la producción dejada de realizar por la de otras embotelladoras del grupo, perjudicando así el adecuado desarrollo del período de consultas.”

La lucha de Coca-Cola se encontraba en un momento decisivo y la resolución del Supremo fortalece la lucha de otros trabajadores que enfrentan despidos masivos.

Alberto Pérez Mayoral, del Comité de empresa de Fuenlabrada, denunciaba que el objetivo de la empresa siempre fue aumentar beneficios a costa del salario de los trabajadores.

“Hay que luchar contra esta multinacional que lo único que hace es expoliar los derechos de los trabajadores. Es un orgullo haber ganado a esta multinacional que es Coca Cola y haberle dicho que o nos devuelve los puestos de trabajo o vamos a seguir luchando. No un año, sino toda la vida, contra multinacionales como Coca Cola”, nos decía Alberto.

El 31 de enero de 2013, las trabajadoras y trabajadores de Coca-Cola Fuenlabrada iniciaron un camino de lucha que han sostenido sin pausa durante 15 meses. Con el objetivo de derrotar el plan patronal y mantener abierta su planta, montaron un campamento frente a la fábrica, sacaron “afuera” el conflicto y buscaron (y ofrecieron) la solidaridad de otros sectores para desarrollar el boicot a los productos de Coca-Cola y torcerle el brazo a la patronal.

Fruto de esta lucha sin tregua, los trabajadores lograron que la justicia declarara nulo el plan de despidos. El 13 de junio pasado, la Audiencia Nacional española dictaminó la anulación del ERE presentado por CCIP. La sentencia del Tribunal, aunque fue recurrida por la empresa, le imponía la readmisión de todos los trabajadores despedidos en sus puestos de trabajo. En noviembre y en enero, nuevas sentencias dieron la razón al reclamo de los trabajadores.

La empresa, sin embargo, no ha acatado hasta ahora ninguna de las resoluciones judiciales, a la que se suma ahora la resolución del Tribunal Supremo.

Los “espartanos y espartanas” de Coca-Cola festejaron hoy entre risas, llantos y abrazos un merecido triunfo. Pero tras 15 meses de lucha en las que han hecho una verdadera escuela, saben que éste no es el final de la pelea. Ahora deben terminar de poner de rodillas a la empresa, que se reabra la fábrica de Fuenlabrada y que sean readmitidos todos los trabajadores y trabajadoras despedidas en sus puestos de trabajo. La lucha sigue.

Publicado por Diego Lotito

Diego Lotito | @diegolotito :: Madrid

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