Sólo un día después del brutal asesinato de un bebé en Cisjordania, quemado vivo dentro de su casa por un ataque de colonos israelíes, dos jóvenes palestinos fueron asesinados por las fuerzas armadas de Israel.

Ambos jóvenes de 17 años han muerto a muchos kilómetros de distancia por disparos de soldados israelíes. Tenían en común: ser palestinos y manifestarse por el cruel asesinato de un bebe y de las quemaduras del resto familia por un incendio cruel por parte de los colonos judíos ayer 31 de julio.

En Cisjordania, Laith Al Jaldi, ha muerto en la madrugada del sábado tras haber recibido disparos de los soldados israelíes cerca de la localidad de Birzait, ubicada en las afuera de la ciudad de Ramala (al norte de Jerusalén). El segundo joven, Mohammed Al –Masri, murió en la noche de ayer viernes en la valla fronteriza de Gaza (sur de Palestina), también como consecuencia de las heridas ocasionadas por los disparos israelíes.

Manifestaciones en Palestina e Israel

El horrendo crimen del bebe en Cisjordania generó una ola de protestas en varias ciudades. Según informa EFE, revueltas de jóvenes palestinos tuvieron lugar cerca del control militar de Qalandia, ubicado entre Jerusalén y Ramala; también en Qadum (cerca de Nablus), Jaljul y Hebron (sur de Cisjordania), en la Ciudad Vieja y en el barrio de Issawiya, ambas en Jerusalén. El periódico israelí Ynet informa de un tiroteo sin heridos desde vehículos palestinos e israelíes en la zona del valle de Jordán.

En Israel, la pacifista ONG Paz Ahora ha convocado una manifestación en Tel Aviv en rechazo a los incidentes ocurridos a lo largo de toda esta semana: los choques entre colonos y las fuerzas de seguridad, el ataque ultraortodoxo a la manifestación del Orgullo Gay y las recientes muertes del bebe y los jóvenes palestinos.

El portavoz de Paz Ahora, en relación con el rebrote de radicalidad ultraortodoxa, sostuvo que “Esto no surge de la nada. Viene de años de odio e incitación desde el más alto nivel de las figuras públicas de Israel”.

También en Jordania y Aman tuvieron lugar protestas y manifestaciones de repudio a los asesinatos.

Cifras espeluznantes en 2014 y 2015

La creación de Israel en 1948, viene acompañada de un serie interminables de cifras manchadas de sangre: una política sistemática y multifacética de represión, aniquilación y deportación de los palestinos y de “lo palestino”, que en resumen ha ocasionado un exilio de un número cercano a los 7 millones de refugiados quienes no pueden regresar a sus localidades, pueblos o ciudades de origen, sin contar las innumerables muertes en 67 años de conflicto y el daño material.

Durante 2014 el hito represivo de Israel sobre el pueblo palestino se centró en Gaza: 50 días de ofensiva guerrerista del Ejercito israelí en el verano de 2014 dejaron 2.104 palestinos muertos, entre ellos 748 mujeres y niños, mientras 100.000 viviendas de refugiados fueron destruidas parcial o completamente, según cifras de la ONU.

En lo que va de 2015 éstas son algunas cifras: han muerto 21 palestinos por acción de las fuerzas de seguridad del Estado de Israel. La ONU contabiliza a día de hoy 112 asaltos de colonos contra palestinos este año. Cifras nada cerradas, donde todo apunta, por los últimos acontecimientos, no van a parar de crecer.

La última ofensiva militar israelí y los constantes ataques contra el pueblo palestino por parte del Estado de Israel, son un nueva demostración de que el pleno derecho a la autodeterminación nacional del pueblo palestino resulta incompatible con la vigencia del Estado de Israel, un estado racista y colonialista en expansión y guerra permanente contra los palestinos y los pueblos árabes.

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