Representantes de la Coordinadora Estatal de Apoyo a la Querella Argentina contra los crímenes del Franquismo viajaron a Argentina para participar de la manifestación del 24 de marzo «por los desaparecidos de Argentina y España».

 

La Querella argentina comenzó el 14 de abril de 2010 con el objetivo de llevar a delante una causa contra 20 represores franquistas, ministros, policías y jueces. Al frente de la misma está la jueza argentina Servini de Cubría y es la única causa judicial que existe en todo el mundo contra la represión de la dictadura franquista.

El 4 de noviembre de 2014, la jueza argentina imputó por crímenes de genocidio a veinte ex cargos franquistas cuya consecuencia fue la emisión de una orden de detención por parte de la agencia Interpol. El Ministro de Defensa español se había pronunciado en contra del pedido de detenciones a los franquistas imputados y la policía se negó a detenerlos.

El 13 de marzo pasado, tal como denuncia la Querella contra los crímenes del franquismo en un comunicado, el Consejo de ministros decidió denegar la solicitud de extradición bajo la aprobación de un acuerdo sobre la no continuación de procedimientos de extradición pasiva, solicitados por las autoridades argentinas, contra veinte ciudadanos españoles por una serie de hechos acontecidos en los años 70 del siglo pasado.

Ante ello, la Querella aseguró que «A pesar de estos obstáculos, las víctimas de graves violaciones de derechos humanos cometidos durante la dictadura franquista, no dejaremos de reivindicar los derechos a la verdad, la justicia y la reparación» y en el marco de su campaña «viajan a Buenos Aires, Carlos Slepoy, del equipo jurídico, y Manuela Bergerot, de la comisión de campañas y comunicación».

El objeto de dicho viaje, además de participar en la manifestación del 24 de marzo que como anunciaron lo hicieron «saliendo a las 14 hs desde Av. de Mayo y Bernardo de Irigoyen», es difundir su campaña de denuncia a lo que ellos llaman «esta nueva violación de nuestros derechos, su impulso entre las organizaciones sociales y políticas y las instituciones públicas».

La Querella ha llegado incluso a la Eurocámara, cuando el pasado 3 de marzo se hicieron presentes para interpelar a los eurodiputados y a la Comisión Europea, denunciado que “Es una vergüenza para Europa que estemos aquí. (…) ningún gobierno español de la democracia ha cumplido con el derecho de acceso a la Justicia de las víctimas y Europa lo ha permitido”, ha señalado a Público Carlos Slepoy, minutos antes de comenzar una rueda de prensa en la Eurocámara.

Ese mismo martes se cumplían 39 años de la «matanza de Vitoria», cuando el 3 de marzo de 1976 la Policía asaltó una iglesia en la localidad vasca asesinando a quemarropa a cinco trabajadores que permanecían en huelga. En ese momento, Martín Villa era el ministro de Gobernación. Dos años y un día antes, el 2 de marzo de 1974, Salvador Puig Antich fue asesinado por el régimen franquista mediante el garrote vil.

Como denuncian desde la organización La Comuna Presxs del franquismo –a quiénes hemos entrevistado desde La Izquierda Diario–, todo el Consejo de Ministros ratificó con su firma la condena a pena de muerte. Entre ellos, José Utrera-Molina, suegro del ya dimitido Alberto Ruiz-Gallardón. Ambos aún viven y jamás han sido juzgados por el Estado español.

Publicado por Cynthia Lub

Cynthia Lub | @LubCynthia :: Barcelona

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