BILD, el diario de mayor tirada de Europa, lanzó el jueves una campaña contra las negociaciones para acordar extensión del rescate a Grecia, llamando sus lectores a enviar “selfies” con titular “NEIN” (“NO”) del periódico. Una campaña reaccionaria que inmediatamente tuvo su respuesta online en solidaridad con el pueblo griego y fue condenada por la Asociación de Prensa Alemana (DJV).
«¡NO! ¡No más miles de millones para los griegos codiciosos!”. Con ese título amarillo y rebosante de prepotencia imperialista alemana, el periódico llamaba en su edición impresa y online de este jueves a sus lectores a tomarse “selfies” contra el pueblo griego y enviarlas a la redacción.
La página dos diario está ocupada íntegramente por su campaña, coincidiendo con la votación que tendrá lugar este viernes en el Bundestag (cámara baja del Parlamento alemán) de la prórroga del programa acordado entre Atenas y el Eurogrupo.
Las votaciones internas realizadas miércoles y jueves en los grupos parlamentarios del Bundestag, arrojaron una amplia mayoría a favor de la propuesta, pese a las disensiones en las filas conservadoras de Angela Merkel.
BILD (antes conocido como Bild-Zeitung) es un diario alemán sensacionalista y reaccionario. Fundado en 1952, es el diario de mayor tirada diaria en Europa y según los últimos datos (2004), el tercero en el mundo.
Con un estilo mordaz, de lenguaje simple, textos cortos y apelación a las emociones de los lectores (y no pocas veces incitando directamente a la violencia), la tradición de propaganda reaccionaria de BILD es larga, lo que le valió la crítica y el repudio de los sectores de izquierda y democráticos de Alemania.
En pleno auge obrero y estudiantil (el ‘68 europeo), BILD fue el catalizador de los ataques más rancios y reaccionarios contra la juventud y la izquierda. Tanto así que cuando Rudi Dutschke, uno de los más reconocidos líderes del movimiento estudiantil alemán, fue víctima de un atentado perpetrado por un nazi que le disparó tres balazos en la cabeza, las manifestaciones de repudio en todas las ciudades quemaban los camiones de distribución de BILD al grito de “BILD jaló el gatillo”.
El 30 de octubre de 2009, el diario fue el organizador de un acto en conmemoración del 20º aniversario de la caída del Muro de Berlín y el triunfo del capitalismo en Europa del Este. Al evento asistieron nada menos que el ex presidente soviético, Mijaíl Gorbachov, el norteamericano, George Bush (p), y el ex canciller alemán Helmut Kohl, que se sacaron una famosa fotografía ante tres segmentos del Muro de Berlín… en la sede del diario.
Más recientemente, ante el triunfo de Syriza, BILD puso en su portada “Triunfa el ‘euro-horror’”, en línea con otros medios de la prensa derechista europea, como La Razón y el ABC españoles,
La Asociación de Prensa Alemana (DJV) instó este jueves a BILD a detener una campaña tachada de “antigriega”.
«Se puede estar a favor o en contra de la política del gobierno federal con Grecia. Pero es contrario al quehacer periodístico lanzar campañas para tratar de influir en decisiones políticas», apunta la DJV en un comunicado.
Para la Asociación de Prensa Alemana, BILD “superó sus límites”, incurriendo en la difamación de todo el pueblo griego.
Aunque el pedido de “objetividad” periodística a un diario cuya esencia es la propaganda reaccionaria dudo que tenga mucho sentido.
Pero el problema no (sólo) es BILD, porque en definitiva su campana “antigriega” es una manera de popularizar el discurso del propio gobierno alemán y la Troika. “Los griegos se cepillaron la guita… ahora, que la devuelvan”. Esa es la máxima con la que viene machacando el establishment alemán y europeo (con la ayuda del mainstream mediático) desde hace años contra el pueblo griego.
La realidad es que el dinero (240.000 millones de euros) que “las instituciones” prestaron a Grecia, no fue a los griegos, sino para rescatar a los bancos alemanes, franceses, ingleses, españoles (y a los propios capitalistas griegos), que tienen bonos de la deuda. A cambio de tremendo favor, la Troika exigió a sucesivos gobiernos entreguistas ajustar al infinito y pauperizar a los trabajadores y el pueblo griego, que acataron a gusto. Mientras, la deuda siguió creciendo hasta llegar a la espantosa cifra equivalente al 180% del PIB griego.
Lamentablemente, el actual gobierno de Alexis Tsipras, que prometió en su campaña electoral “terminar con la austeridad”, terminó cediendo a las imposiciones de la Troika.
Pero el cinismo imperialista alemán no tiene límites. Mientras BILD da rienda suelta a esta campaña reaccionaria contra los “griegos codiciosos”, la UE se prepara para darle al gobierno de Ucrania 22 billones de euros (miles de millones) para comprar armas, como denunció el periódico online Redpilltimes.
“¿Por qué nadie está preguntado por qué la UE, a través del Eurogrupo, es todo acerca de imponer condiciones y reuniones de toda la noche para que Grecia pueda conseguir incluso una leve extensión de apoyo, mientras que el mismo FMI y la UE siguen repartiendo dinero a Ucrania sin apenas un susurro?”, se pregunta, y con razón, el editor de la revista.
Afortunadamente, la desdeñable campaña de BILD no sólo caló entre sus lectores que se hicieron eco del ataque contra los griegos, sino también en muchos de sus críticos que iniciaron una “contracampaña” en Twitter.